Escribir a mano -así como diseñar, dibujar o calcular- parecen tener muchos beneficios cognitivos respecto de sus homólogos electrónicos. Al respecto leía en el New York Times, un interesante artículo de María Konnikova.
Desde siempre me atraen los ejercicios combinados entre lo digital y lo manual, como maquetas (diseñadas en la compu) para recortar y armar a mano, dibujos hechos en forma digital para retocar o pintar a mano, la escritura a mano, textos y guías de trabajo digitales para completar a mano. O las letras manuscritas convertidas en fuentes, así como las fuentes de estilo "manuscrito".
No encuentro sentido a las dicotomías que pretenden enfrentar la tecnología con lo artesanal -muchos de los objetos que hacemos con la computadora son de estilo "artesanal" especialmente en la Programación, y otras veces lo "resuelto" con la computadora es de menor elaboración que lo organizado sin ella, desde el resumen de un texto, la búsqueda de información en diversas fuentes, el dibujo de un mapa o un cálculo matemático-.
Alguna vez llegué hasta a pensar que en realidad ninguna "tecnología" era imprescindible para enseñar realmente, ni siquiera el lápiz y el papel.
Pero a la hora de elegir, prefiero la combinación de recursos de todo tipo, desde el papel hasta la tablet. Cualquier herramienta puede resultar de gran significado si tenemos algo interesante que decir.
Desde siempre me atraen los ejercicios combinados entre lo digital y lo manual, como maquetas (diseñadas en la compu) para recortar y armar a mano, dibujos hechos en forma digital para retocar o pintar a mano, la escritura a mano, textos y guías de trabajo digitales para completar a mano. O las letras manuscritas convertidas en fuentes, así como las fuentes de estilo "manuscrito".
No encuentro sentido a las dicotomías que pretenden enfrentar la tecnología con lo artesanal -muchos de los objetos que hacemos con la computadora son de estilo "artesanal" especialmente en la Programación, y otras veces lo "resuelto" con la computadora es de menor elaboración que lo organizado sin ella, desde el resumen de un texto, la búsqueda de información en diversas fuentes, el dibujo de un mapa o un cálculo matemático-.
Alguna vez llegué hasta a pensar que en realidad ninguna "tecnología" era imprescindible para enseñar realmente, ni siquiera el lápiz y el papel.
Pero a la hora de elegir, prefiero la combinación de recursos de todo tipo, desde el papel hasta la tablet. Cualquier herramienta puede resultar de gran significado si tenemos algo interesante que decir.