viernes, 25 de junio de 2021

EDITH BRUCK

Hoy recibí la noticia de mi amiga Deborah Taub sobre la visita que el Papa le hizo a su tía, Edith Bruck, como reconocimiento por su trayectoria como escritora e historiadora de la Shoá, de la cual es sobreviviente, al igual que su hermana, la madre de mi amiga.

Si bien no la conozco personalmente, siempre supe sobre su vida por Déborah y su entrañable vínculo con ella. Entonces quise publicar algo sobre ella, que haré a continuación:

El Papa visita a Edith Bruck, superviviente de Auschwitz 

La escritora húngara, de casi noventa años, vive en Roma desde hace mucho tiempo. L'Osservatore Romano la entrevistó el pasado mes de enero con motivo del Día de la Memoria. 
Francisco quedó impresionado por su testimonio y hoy decidió ir a conocerla a su casa en el centro de Roma. 
Por primera vez en varios meses, el Papa dejó el Vaticano este sábado por la tarde para pasear por una calle del centro de Roma y encontrarse con Edith Bruck, una escritora hebrea de origen húngaro que ha pasado dos tercios de su vida en Italia. 
Francisco había leído su entrevista en L'Osservatore Romano, en la que relataba el horror vivido por ella y su familia durante la persecución nazi, y se sintió muy conmovido. 
Pidió reunirse con ella y fue a su casa romana esta tarde para visitarla. 
"He venido aquí, a su casa, para agradecerle su testimonio y rendir homenaje al pueblo martirizado por la locura del populismo nazi", dijo el Papa tras el encuentro. 
Repito con sinceridad las palabras que pronuncié desde el fondo de mi corazón en Yad Vashem, y que repito ante cada persona que, como ella, ha sufrido tanto por ello: "Perdóname, Señor, en nombre de la humanidad". 
El encuentro contó con la presencia del director de L'Osservatore Romano, Andrea Monda, que el pasado 26 de enero había publicado una emotiva entrevista con la escritora, realizada por Francesca Romana de' Angelis. 
Edith Bruck dedicó su vida a dar testimonio de lo que vio. La última voz recogió en el campo de concentración de Bergen-Belsen fue de dos desconocidos, quienes le pidieron que lo hiciera: "Cuéntalo, no te creerán, pero si sobrevives, cuéntalo, incluso por nosotros". 
Y cumplió su promesa. Lo que llama la atención, al leer los episodios descritos en la entrevista, es la mirada de esperanza que Edith consigue transmitir. Incluso cuando relata los momentos más oscuros, el abismo de horror en el que ella, de niña, se vio sumida, perdiendo a gran parte de su familia, no deja de fijar su mirada en algo bello y bueno, en algún atisbo de humanidad que le permitió seguir viviendo y esperando. 
Así, al describir la vida en el gueto después de haber sido arrancada junto con sus padres y hermanos de la casa del pueblo rural donde vivía, cuenta que un hombre no hebreo regaló una carreta de víveres para ayudar a los perseguidos. Mientras cuenta su época de trabajo en Dachau cavando trincheras, recuerda que un soldado alemán le tiró su cazo para lavar, "pero en el fondo había dejado un poco de mermelada para mí". 
Y mientras describía su trabajo en las cocinas para los oficiales, apareció la figura de la cocinera, que le preguntó cómo se llamaba y al oír la respuesta de Edith, con voz temblorosa, le contestó: "Tengo una niña de tu edad". 
Al decir esto, "sacó un peine de su bolsillo y mirando mi cabeza con el pelo recién crecido me lo dio. Fue la sensación de encontrar un ser humano frente a mí después de tanto tiempo. Me conmovió ese gesto que era vida y esperanza". 
Unos pocos gestos bastan para salvar el mundo, concluye Edith Bruck, que hoy ha recibido en su casa al Obispo de Roma que ha venido a conocerla.

miércoles, 9 de junio de 2021

EL ZEN DE PYTHON

Lo bello es mejor que lo feo. 
Explícito es mejor que implícito. 
Es mejor  simple que complejo. 
Complejo es mejor que complicado. 
Plano es mejor que anidado. 
Es mejor esparcido que denso. 
La legibilidad cuenta. 
Los casos especiales no son lo suficientemente especiales como para romper las reglas. 
La practicidad vence a la pureza. 
Los errores nunca deben pasar silenciosamente. 
A menos que estén explícitamente silenciado. 
Ante la ambigüedad, rechace la tentación de adivinar. 
Debe haber una, y preferiblemente solo una, forma obvia de hacerlo. 
Aunque esa forma puede no ser obvia al principio a menos que seas holandés. 
Ahora es mejor que nunca. 
Aunque a menudo nunca es mejor que * ahora mismo *. 
Si la implementación es difícil de explicar, es una mala idea. 
Si la implementación es fácil de explicar, puede ser una buena idea. 
Los espacios de nombres son una gran idea, ¡hagamos más de eso!

jueves, 3 de junio de 2021

RECUERDOS DE ANDREA




En mi blog SEGUIR ESTUDIANDO 2020 que comenzó con la pandemia, hice una "sección" etiquetada Recuerdos de Informática en la que publicamos fotos de cursos, alumnos, docentes y amigos que pasaron por nuestras aulas. 

En este caso, Andrea Noceda fue mucho más que una docente o una alumna ya que colaboró intensamente durante varios años en la creación de nuestro Laboratorio de Computación. 

Nuestra consultora fue cambiando de estructura a la luz de los vaivenes de la economía argentina y de la coyuntura educativa y aquel proyecto de que Andrea, así como otros colaboradores, siguieran trabajando conmigo durante mucho tiempo, no se dio como lo había soñado.

De aquellos años ella rescató fotos con dos regalos que le hice, que no recordaba. De allí que es tan importante para mí esta sección del blog con la que vamos reconstruyendo parte de nuestra historia personal y laboral.